La cromoterapia es una terapia complementaria que tiene sus orígenes en antiguas civilizaciones como la de Egipto, China, India e Irán, donde se descubrieron los poderes curativos de los colores y los aplicaron en distintas terapias y formas. A parte de estas civilizaciones, por todo el mundo se ha adorado al Sol (sus rayos contienen todos los colores del espectro) en distintas formas y se apreciado su valor terapeútico para la vida. Después de las antiguas civilizaciones, la cromoterapia estuvo olvidada y en muchos casos mal vista, hasta que en el siglo XVIII científicos y filósofos se interesaron por ella y en el siglo XX empezó a utilizarse de nuevo con fines terapéuticos.
- Los colores utilizados son ocho: el rojo, el naranja, el amarillo, el verde, el turquesa, el azul, el violeta y el magenta. Tienen el poder de relajar, excitar, equilibraro alterar nuestras percepciones y sensaciones.
Son muchos los ejemplos que nos han quedado de la utilización de los colores para el bienestar y sanar. En las mezquitas de Irán se utilizaron azulejos vidriados de diferentes colores para la inspiración y purificación del espíritu. En las grandes catedrales de la Edad Media, existen grandes vidrieras de colores que inundan la nave principal de luz del sol, donde la gente asistía para tomar “baños de sol” para recuperar la salud y reforzar el espíritu. Los templos egipcios también se construyeron para canalizar la luz del sol con fines sanadores, por ejemplo, el Templo de Heliópolis (Templo Solar de Heliópolis, ciudad del antiguo Cairo), se construyó de tal manera que el sol al entrar descompusiera sus rayos en los 7 colores del espectro para que fuesen útiles para la curación.
En el siglo XVII, Johann Göethe estudió y provó los efectos fisiológicos y psicológicos de los colores en los seres humanos, desarrolló un triángulo con los tres colores primarios rojo, amarillo y azul y relacionó cada color con ciertas emociones humanas.
En India aparecen los colores en las teorías de los chakras y en China con sus aplicaciones para la vibración y su interactividad con “los elementos”.
Es maravilloso adentrarse en el mundo mágico de los colores, la luz y su relación con nuestras emociones.