Las hemorroides se derivan de un problema de circulación sanguínea y suele ser un síntoma añadido a la flebitis o varices; son varices que se acentúan con los problemas de estreñimiento. Se inflaman sobre todo al final de la jornada despues de haber pasado mucho tiempo sentado o de pie. Producen dolor, escozor y picor y pueden llegar a sangrar.
Para solucionar este problema es necesario e importante llegar a la raíz del desequilibrio circulatorio a la vez que se debe mejorar la alimentación para evitar el estreñimiento porque sino los remedios solo aliviaran temporalmente el síntoma que volverá a aparecer una y otra vez si no se realiza un tratamiento de fondo.
Dieta recomendada: Evitar la grasa animal, la carne en exceso, la sal, el azúcar refinado y aumentar el consumo de yogur, miel, frutas, acidos grasos esenciales y verduras (al vapor por ejemplo, con aceite de oliva), acompañadas de infusiones digestivas y depurativas o que mejoren la circulación (nada de café ni té, y mucho romero, tomillo, rooibos, anís, menta...). Tomar muchos líquidos naturales (agua y zumos naturales).
Como norma, para evitr problemas de circulación o hemorroides, es recomendable sustituir la sal común por sal del Himalaya (sala evitando la hipertensión y los problemas de retención de líquidos y mala circulación) y sustituir el azúcar blanco refinado por azúcar de caña, estevia y/o miel.
Para ayudar a solucionar problemas de estreñimiento es aconsejable consumir semillas de lino (linaza).
Las semillas contienen fibra y mucílago, que es un compuesto que en contacto con el agua se hincha y ayuda a provocar la defecación. Además las semillas de lino se pueden consumir en el yogur, en ensalada, junto con legumbres... se suelen consumir crudas y además tienen muy buenas propiedades antioxidantes y anticancerígenas.
La vid roja tiene extraordinarias propiedades que mejoran la circulación sanguínea, por lo que previene y cura varices o hemorroides.
El aceite esencial puro de ciprés aplicado en forma de gotas en el agua de lavado, mejora la circulación sanguínea local y es ligeramente analgésico.
El Omega-3 es un suplemento imprescindible para casos de mala circulación que causan bloqueos sanguíneos y pérdida de tonalidad de las paredes venosas.
Para aliviar la inflamación además, habrá que aplicar frío (lavados de agua fría) y frío seco local en tandas de 10 minutos. También será recomendable permanecer todo lo posible tumbado y estirado.
En cualquier caso un especialista habrá de determinar la causa del desequilibrio sanguíneo que impide el retorno venoso y causa estancamientos; los remedios solo suponen un alivio de los síntomas y detienen el deterioro, pero es necesario encontrar la verdadera raíz del problema para evitar otras complicaciones sanguíneas.
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