El Déjà vu es un suceso bastante conocido del que realmente no se sabe tanto. El término fue acuñado por Émile Boirac (investigador psíquico francés) y significa, “ya visto”; pero clínicamente se le denomina paramnesia.
Se dice que una persona ha tenido un déjà vu cuando reconoce una situación nueva como algo que ya le ha sucedido anteriormente, que ya lo ha vivido, por lo que va acompañada de una sensación de extrañeza y familiaridad.
Se pueden diferenciar tres tipos distintos de déjà vu:
- Déjà vécu se suele traducir como 'ya vivido' o 'ya experimentado'. Es el déjà vu más común y, según los estudios, hasta un 70% de la población lo ha experimentado alguna vez en su vida. Normalmente el hecho que se recuerda no suele ser importante, pero sí se fija de por vida en el recuerdo el haber tenido un déjà vu. Lo curioso es que se recuerdan detalles muy minuciosos, hasta el orden de las conversaciones, los gestos, colores… lo cual hace que la sensación de recuerdo sea muy intensa.
- Déjà senti es cuando se revive algo ya sentido, al no existir una precognición la sensación de sentir algo ya vivido no permanece en la memoria por mucho tiempo.
- Déjà visité o “ya visitado” es la experiencia de visitar un sitio nuevo y creer que ya se ha estado allí antes, en estos casos se puede conocer el camino a seguir hacia un punto determinado sabiendo con certeza que es imposible.
La experiencia del déjà vu se da con más frecuencia entre los 15 y los 25 años, edades en las que la mente aún está en edad de advertir el cambio en el entorno. Existen investigaciones al respecto que aseguran que estas sensaciones se acusan más en personas que sufren de epilepsia temporal.
Pero, ¿cuáles son las causas por las que se tiene un déjà vu? ¿Con que frecuencia se da? ¿Es la evidencia de alguna enfermedad?
Hasta el momento no existen investigaciones científicas concluyentes, no se han identificado las causas de dicha experiencia, ni las partes del cerebro que intervienen cuando se da porque es prácticamente imposible estudiar a una persona en el momento en que lo sufre, es impredecible su manifestación.
La explicación más probable es que se trate de una anomalía de la memoria. Esta explicación se deriva de que del recuerdo previo (lo que estamos recordando que sentimos que lo hemos vivido antes) no se recuerdan muchos detalles de las circunstancias en que se dio, pero sin embargo si se recuerda haber tenido el déjà vu.
Además, muchos teóricos creen que el problema está en que la mente consciente va ligeramente atrasada al inconsciente. Esto se traduce en que si el inconsciente percibe el entorno antes que el consciente, el consciente lo que percibe es que el inconsciente ya lo ha percibido, y por lo tanto lo que estás viviendo ya no es una nueva experiencia sino un recuerdo.
Para las investigaciones pseudocientíficas este hecho se ha venido relacionando con la precognición, los viajes astrales, y la capacidad del hombre para predecir el futuro, por lo que dicha capacidad es una aptitud psíquica que la posee la humanidad en general.
Para otros un déjà vu es la memoria de los sueños, el recuerdo no de algo vivido sino de algo que se ha soñado. Existen sueños que nos advierten de pensamientos del cerebro de forma inconsciente o de instintos primarios, que cuando nos suceden en la vida real puede dar lugar a un déjà vu.
En la actualidad se continúa realizando estudios acerca de este fenómeno que se ha diagnosticado en algunos casos como crónicos (personas que sufren de esta anomalía habitualmente) a través de déjà vus inducidos por hipnosis.