La alergia es uno de los problemas de salud más importantes en nuestra sociedad, que además afecta cada vez más a niños y cada vez de forma más agresiva. Uno de los puntos más graves en relación a la alergia es que pareciera que no tiene solución y tenemos que resignarnos a ser enfermos crónicos. Las vacunas son una de las soluciones más recomendadas por la medicina alopática, pero la mayoría de las veces tienen un éxito relativo ya que a largo plazo vuelven a surgir las mismas o nuevas alergias. La triste realidad de las personas que sufren alergias es que suelen pasar la vida tomando un coctel de medicamentos y huyendo de las sustancias que causan reacciones alérgicas, que además cada vez son más. Pero desde la naturopatía planteamos soluciones más acordes con nuestra naturaleza y desde un punto de vista integrativo, para que las personas con alergia recuperen su calidad de vida no solo paliando los síntomas, sino con mejorías profundas.
En este artículo vamos a hablar sobre el MSM, que es un compuesto orgánico del cliclo del azufre presente en el organismo de casi todos los animales de nuestro planeta. Queremos aclarar antes de comenzar, que nada tiene que ver con el “famoso” MMS (dióxido de cloro), que es un fuerte oxidante envuelto en una gran controversia.
El dolor es una percepción que se produce cuando las terminaciones nerviosas reciben un exceso de estímulos y envían al cerebro una señal de alerta. Un exceso de estímulos puede ser un exceso de calor o de presión (golpe fuerte) o un cambio producido por agentes químicos extraños en nuestro organismo. La naturaleza nos provee de plantas medicinales y remedios para aliviar el dolor.
La artritis es una enfermedad que se manifiesta produciendo inflamación en las articulaciones. Esta inflamación produce dolor y rigidez que dificultan el movimiento. La artritis puede ser una consecuencia de multitud de afecciones, casi siempre de caracter infeccioso, y suele producirse cuando el sistema inmunológico se encuentra debilitado.
La artrosis es una enfermedad degenerativa producida casi siempre con el desgaste del tejido cartilaginoso del sistema muscular que suele afectar a personas de mayores de 50 años. Cada vez más se da en personas jóvenes como una reacción autoinmune.
Los problemas de la piel que cursan con erupción, irritación, rojez, sequedad, descamación, grietas, inflamación y/o picor, se agrupan en el término dermatológico “dermatitis”.