Según la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico), España es de los países europeos con menos nacimientos en 2014, solo Portugal y Polonia tienen peores cifras que nosotros. Además de las causas socio-económicas, se suma la alta tasa de infertilidad femenina que en países supuestamente desarrollados se ha convertido en un problema cada vez mayor para miles de parejas, y es que aproximadamente un 20% de las mujeres sufre algún tipo de problema de fertilidad, a lo que debemos sumar los problemas de fertilidad masculina.
Desde la pubertad, el cuerpo de la mujer se prepara periódicamente para albergar su óvulo fecundado y procurar un buen embarazo. Esta preparación se repite cíclicamente cada 28 días (aprox.) sin cesar desde la pubertad hasta la menopausia, aproximadamente 500 veces a lo largo de nuestra vida.
Cuando la mujer aún no ha nacido y se encuentra en el útero materno, tiene aproximadamente 7 millones de óvulos ya generados y se van perdiendo hasta que en la pubertad solo quedan 400.000 óvulos aproximadamente.
El ciclo menstrual comienza el primer día de sangrado y termina antes del siguiente sangrado. Durante este tiempo, como decíamos, el cuerpo se prepara para un embarazo, el útero se recubre y ensancha su endometrio gracias a que aumentan los niveles de estrógeno, y el óvulo empieza a madurar en uno de los ovarios. Después de 14 días de maduración, el óvulo sale del ovario y viaja por las trompas, y si no es fecundado, se desechará junto con los recubrimientos uterinos mediante la menstruación.
Este ciclo completo suele durar 28 días y entre 3 ó 5 días de sangrado, aunque cada mujer tiene su propio calendario menstrual, ya que no todos los cuerpos son iguales, ni las hormonas de todas las mujeres funcionan de igual manera.
Vamos a explicar cada fase del ciclo menstrual y la ovulación: