Si eres mujer o niña mayor de 14 años, hombre joven o adulto con algún achaque de salud seguramente habrás oído multitud de versiones diferentes sobre la Dieta sana. Grasas malas, leche sin lactosa, dietas hiperproteicas , calorías, cereales integrales, efecto rebote… qué lío, no? Pero en realidad llevar una correcta nutrición es algo innato, natural y lógico. A veces, cuanto más nos esforzamos por hacerlo bien, más complicamos nuestra dieta y dejamos de lado nuestro sentido común, por eso, vamos a repasar los principales errores que se comenten en las supuestas dietas saludables.
Si preguntamos a las personas de nuestro alrededor “tú ¿qué tal comes?” seguramente nos respondan “yo muy bien, como de todo”. Y es que si algo tenemos en común las personas es la opinión de que comemos muy bien y muy variado, pero la realidad es que vivimos en una sociedad malnutrida y llena de enfermedades y trastornos derivados de una dieta pobre y demasiado toxificante.
Partiremos de la base de que que para sobrevivir y vivir con salud necesitas: carbohidratos (azúcares), proteínas, grasas, fibra, agua, vitaminas y sales minerales. Si te falta algo de esto, enfermas, y si te sobra algo de esto y tu cuerpo no puede eliminarlo, enfermas también.
Pues bien, una dieta sana y equilibrada se basa en conseguir todo lo que necesitas y evitar todo lo que intoxica, y para eso necesitamos educación nutricional y consciencia alimentaria.